Tal vez no sea el mejor artículo para empezar un proyecto, pero es noticia, así que comparto con vosotros mi opinión:
Bread and Butter da la espalda a la ciudad de Barcelona, la estatua central de la feria parece confirmarlo.
Personalmente he asistido a todas las ediciones de la feria, las primeras con ilusión, con ganas y disfrutando, porque parecía venir a revolucionar las ciudad de Barcelona y el sector de las ferias que parecía algo decaido ( lo estaba aún, sigue estándolo y parece que empeorará ).
Poco a poco, edición a edición, me he desencantado, y no lo digo ahora, como el que hace leña del árbol caído, es que hace tiempo que dejé de pensar en el Show como una feria, es eso, un Show, es un concepto, ( ver ¿ es rentable Bread and Butter ? ) no una feria, es una manera de entender la imagen, no la ropa, sino la imagen de la empresa, el glamour, el fashion, …
Hoy lo comentaba con Teo, nuestro cámara con quien he grabado más de 200 vídeos solo en esa feria, la necesidad de mirar la feria a través del pequeño visor de la cámara, la necesidad de analizarlo todo para grabar una pieza de dos minutos que cuente una historia te obliga a fijarte en los detalles, y con esta feria, tras el absoluto enamoramiento de la primera edición hemos ido desenamorándonos poco a poco, lenta pero inexorablemente.
Bread and Butter es algo así como la reina del baile de fin de curso, en el momento en el que entró en escena todas las chicas parecían feas a su lado, algunas corrieron al lavabo para maquillarse como ella, para disfrazarse como Bread and Butter, pero la reina era única e intentar imitarla solo aumentaba las diferencias.
Todos babeábamos a su alrededor, nos subyugó con su glamour cosmopolita a todos y prensa, expositores, profesionales, …, todos dejamos de bailar con la chica que habíamos llevado al baile, la dejamos tirada, nos parecía cateta e insignificante, las dejamos llorando en un rincón, …
Poco a poco ha ido cambiando, muchos chicos querían bailar con ella, todos le pedían un baile, todos querían participar y ella decía que no, altiva, que no eran dignos de ella y no les dejaba bailar, conozco al menos 50 empresa que han hecho grandes esfuerzos por entrar en la feria y han recibido no solo la negativa sino incluso la indiferencia altiva de la diosa, que les contestaba: no, no eres digno de bailar conmigo, construye marca, sé más rompedor, innova, brilla, porque yo solo bailo con los chicos del equipo de “football”
Nosotros, como medio de comunicación, nos las tuvimos el año pasado con el gabinete jurídico de la diosa, que nos enviaba cartas en “idioma extranjero”, los proveedores habituales de la fira de Barcelona se han visto relegados, porque la mayor parte del personal lo traen de Alemania, no sea que rompamos algo, como si no se fiasen de los nativos, … la actitud de la feria, de la organización, ha sido bastante soberbia, creo que todos los que se han relacionado con ella lo pueden corroborar.
Pero es que es hermosa, dios, que hermosa es la puñetera, como brilla en el baile, como enamora, la primera vez que la ves moverse crees que tardarás en disfrutar de un espectáculo tan hermoso ( sé que soy un exagerado, pero en serio, para quien no haya asistido a ninguna edición, la primera vez que ibas a la feria, todas las ferias te parecían una porquería a su lado), SIMM te parecía una feria de pueblo ( y pido desde aquí disculpas a la Organización y a los expositores, aunque el espejismo me durara solo una edición ), FIMI casi agoniza ( que bastante tocada estaba y solo le faltaba que apareciese esta diva en escena ), …
Hace tiempo que lo comentamos, no diré como llama mi amigo Teo a la feria porque son palabras suyas y es muy tarde para despertarlo y pedirle permiso para la cita, pero yo, cuando voy a la Bread es como si fuese al Zoo, un Zoo del que formo parte, un Zoo en el que nos vestimos de Pavo Real ( aunque un servidor lo haga todos los días ), sacamos pecho como leones y alzamos el cuello como jirafas.
Bread and Butter es la feria de las vanidades, la maravillosa y divina feria de las vanidades, una feria de cartón piedra, que es una feria que no es feria, donde hay más revoltosos que clientes y de la que sales exhausto, pero hay que reconocerlo,
Bread and Butter enamora, es y seguirá siendo la reina del baile, se celebre donde se celebre el baile
Tal vez sea mejor que desaparezca, lo siento por la ciudad y por el espectáculo visual, porque en pocos recintos ( y conozco más de 500 ) en el mundo lucirá como ha lucido en Barcelona, pero la feria estaba decayendo, cada vez menos chicos le pedían que bailase con ellos, los del equipo de “football” ( grandes marcas ) bailaban con ella arrastrando los pies, desganados, un poco como diciendo, si bailo con ella no porque sea la reina, bailo con ella porque sino no se creerán que soy del equipo de “football”
Bread and Butter sirve para hacer marca, para suponer un gran revulsivo en el sector ( de la moda y de las ferias en general ), Bread and Butter deslumbra en su primera edición y se hace amar en la segunda, pero es mejor que no haya una tercera, en serio, lo mejor que podría pasarle a la feria y al sector de las ferias es que se convierta en un espectáculo itinerante, algo así como el Cirque du Soleil de las ferias.
Lo ideal es que cada año se celebrase en una ciudad, en un continente, que concentre toda la oferta de ese país, de ese mercado, que realmente haya tendencia y no los mismos stands año tras año, los mismo personajes “extravagantes”, las mismas bellezas, los mismos forzudos de circo, …
Lo digo con todo el cariño del mundo, no digo que esos stands no tengan nada que ofrecer, digo sencillamente que para el “equipo de football” ( las grandes marcas ) será beneficioso transmitir esa potencia en todos los mercados y no puede existir una segunda Bread and Butter en el mundo, y para los medianos y pequeños, para los expositores Nacionales y Continentales dos ediciones son suficientes para darle un empujoncito a su Internacionalización, pero una vez hecho eso, una vez han conocido clientes de diferentes mercados y han testeado sus productos analizando en que países encaja mejor su producto e mejor asistir a ferias en esos mercados, a ferias de las de toda la vida, se baila una vez con la reina del baile, pero uno se casa con la novia de toda la vida.
Y bueno, dicho esto, larga vida a la reina, si el año que viene se celebra en Berlín allí estaré ( si no se enfadan conmigo y me prohiben la entrada, porque os aseguro que los padres de la Reina tienen una mala leche del carajo ) y lo sentiré por la ciudad de Barcelona porque pierde una gran afluencia de público y de ingresos, y me alegraré por el sector ( porque volverá a enamorar otra ciudad ) y me alegraré por las ferias de España, porque seguirán su largo noviazgo pero sabiendo que si no tratan bien a su novio se quedarán plantadas en el altar.
Señores la reina nos deja, suenan las doce, debe partir antes de que la carroza se convierta en calabaza y los caballos en ratones, nos deja el regusto amargo de su belleza y un zapatito de cristal que no encaja en ningún pie.